Porque si vosotros no perdonareis, tampoco vuestro Padre que está en los cielos os perdonará vuestras ofensas.

Que difícil!!!! Jesús lo explico en una parábola: Un rey hizo cuentas con sus siervos, y uno de ellos le debía diez mil talentos. Eso en nuestro contexto significa millones de dolares. Es decir, esta era una deuda que ese siervo nunca iba a poder pagar. Después de escuchar sus súplicas este rey fue movido a misericordia y le perdonó esa gran deuda.
Cristo quiso decir que tal como este siervo, nosotros tenemos una deuda impagable al Rey de los cielos. El nos creo para El y desde el simple hecho de tener malos pensamientos hasta cosas mas evidentes nos hacemos indignos de ser perdonados por un Dios que es Santo y que por su naturaleza no puede convivir con el pecado. Pero por su gran amor y misericordia nos dio provisión: a su hijo Jesucristo para tomar nuestro lugar y pagar nuestras deudas. Si analizáramos bien esto, nos faltarían palabras, ánimos y todo nuestro ser para agradecer ese gran regalo.
Sin embargo Cristo prosigue con la parábola: "pero saliendo ese siervo se encontró con uno de sus consiervos que le debía cien denarios, y ahogándolo le decía, págame lo que me debes. Mt.18:28"
Estos cien denarios eran como cuatro mil dolares. El consiervo también le rogaba perdón, pero igual fue echado a la cárcel.
¿Que hizo el rey cuando se entero? Se enojo y lo entrego a los verdugos hasta que pagara el ultimo centavo.
¿Que nos quiso decir Cristo? Una ofensa es igual a una deuda. ¿No sentimos acaso cuando alguien nos ofende que no vamos a descansar hasta que nos pida perdón o en el peor de los casos hasta que lo veamos recibiendo un gran castigo por meterse con nosotros?
La biblia nos dice que si nosotros no perdonamos a otros sus ofensas El tampoco nos perdonara a nosotros las nuestras. Sé que es difícil, y mas para algunos que para otros.
Amiga, libérate de la calamidad y las consecuencias que puedas recibir por no perdonar a los que te hicieron daño, si no puedes, acércate a Dios, pídele perdón por no poder liberar a esa o esas personas, y que El obre en tu corazón, el cambiara tu corazón y te hará libre.
Sabias que se ha comprobado cientificamente que la falta de perdón trae como consecuencia enfermedades tales como el cancer?, eso sin contar que no podremos acercarnos a Dios con libertad si no perdonamos. Cuantas veces me deje llevar por la amargura viendo que personas (incluso las que decian amarme), me hirieron, traicionaron, dieron la espalda cuando mas los necesitaba, y no recibian ningun castigo por esto. El castigo lo recibi yo porque termine deprimida y sintiendome fracasada. Y les soy sincera, al principio obedeci por amor a mí, porque me canse de hacerme daño, pero ahora veo que cada error que cometemos como humanos no tiene ni la millonesima parte del tamaño de su misericordia. Alegrémonos en esto, en que somos hijitos amados de un padre excepcionalmente bueno y amoroso. Que quiere lo mejor para nosotros.

Vienen dias en que hare surgir un hijo justo a David, reinara con poder y sabiduria y se le dara este nombre "El Señor es nuestra salvacion"

Muchos años me queje por mis problemas, inclusive culpe a Dios por ellos. Desde niña tuve una relacion personal con Dios y mis mejores amigos me decian "no entiendo, amas a Dios, porque tienes tantos problemas?", no sabia que decirles, pues no entendia porque las cosas tenian que ser asi.
En la palabra dice "Porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo. Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina?–(Hebreos 12:6-7)"
Con los años entendi que todo lo vivido no era mas que consecuencia de mis malas decisiones. Es cierto que tuve una educacion errada acerca del trato de Dios y las consecuencias de nuestros actos. Cuando lo entendi, deje de culpar a Dios, y en cambio pude encontrar el gran amor que tiene mi Padre. Que hubiera sido de mi si no hubiera recibido azote por cada mala decision tomada, por cada capricho, por cada manipulacion?
Pero a pesar y con alegria puedo decir que Dios me es mi padre y nunca me dejo, nunca me dejara, no importa lo que haga, no importa mis consecuencias, el no me quita su amor, que no se compara al de nadie, ni siquiera al de mi hijo o mis padres.
Ya les contare en los siguientes dias detalles de mis experiencias con el Señor.
Si quieres experimentar ese gran amor, reconoce que por ti misma no puedes hacer nada, entregale todo a Cristo, tus virtudes y defectos. Espero ser util para alentarnos unas a otras.
Con amor,

ELV